Cuando muestra cambios en el comportamiento, dificultades escolares, miedos excesivos, tristeza prolongada, problemas para relacionarse o tras vivir situaciones difíciles como un divorcio o una pérdida.

Se utilizan técnicas adaptadas a su edad como el juego terapéutico, cuentos, dibujos y dinámicas que permiten expresar lo que sienten y piensan de forma natural y segura.

Sí. El trabajo con los padres es fundamental para comprender el entorno del niño y ofrecer pautas que favorezcan su evolución dentro de la familia y el colegio.

Varía según cada niño y su situación. En general, se hace una evaluación inicial y se plantea un plan flexible que se ajusta al ritmo y evolución del menor.

Se observan mejoras en el estado emocional, en la conducta y en la comunicación del niño. También los padres notan cambios positivos en casa y en el entorno escolar.